La medida buscaría paliar el alza que podrían experimentar las cuentas de la luz durante 2021 debido al término del fondo pactado el año pasado y que debería haber durado hasta 2023. Las empresas generadoras estiman que, por efecto del dólar, los recursos aseguran solo este 2020.
Hace varias semanas que está sonando fuerte un rumor en el sector eléctrico. Se trata de la posibilidad que el gobierno decida extender la vigencia del fondo del estabilización eléctrico, legislación que se pactó luego del estallido social de octubre pasado, como una forma de evitar un alza relevante en las cuentas de la luz y que, debido al impacto del incremento del dólar, su vigencia llegaría solo hasta el año 2021.
El tema lo puso esta semana abiertamente sobre la mesa la consultora Systep, la que en su reporte de abril señala que esta podría ser una alternativa del Ejecutivo para paliar un incremento de las boletas eléctricas durante el próximo año, período en que aún se vivirán los efectos de la crisis económica que está provocando en el país la pandemia por Covid-19.
La firma detalla en su informe que debido a la estabilización de las tarifas de energía y potencia que pagan los clientes regulados, parte de estas generadoras ya han acumulado sobre US$ 375 millones en saldos impagos a diciembre 2019. “Si bien para los clientes dicha estabilización resulta de gran ayuda, esta se aplicará hasta llegar a un límite de saldos impagos de US$ 1.350 millones”, recalca la consultora.
Añade que de acuerdo a las cifras publicadas por la Comisión Nacional de Energía (CNE), el 28% de dicho límite ya fue alcanzado en diciembre 2019, “mientras se proyecta que se llegaría al 43% a mediados de este año”.
Pero Systep señala que de acuerdo con sus estimaciones, si el tipo de cambio se mantiene sobre los $850, el límite se alcanzará entre el segundo semestre de 2021 y el primer semestre de 2022. Por lo tanto, “si las secuelas económicas se prolongan hasta el próximo año, la autoridad podría evaluar la extensión de este mecanismo, pero antes deberá considerar cuidadosamente los efectos tanto para las generadoras como para los clientes”, propone la firma.
En el sector eléctrico indican que la consultora -donde el académico de la Universidad Católica Hugh Rudnick es director- es “conservadora” en sus estimaciones. Valgesta, de hecho, estima que los recursos del fondo se agotarán en junio del próximo año. “En caso que el tipo de cambio sea de un promedio de $850 en los próximos meses, el fondo de US$ 1.350 millones del PEC se agotaría en junio de 2021”, señala Andrés Romero, exsecretario ejecutivo de la CNE y actual socio de Valgesta.
Las empresas generadoras indican que “a la fecha, las proyecciones que se manejan es que el fondo alcanzaría a durar al menos todo lo que resta el año 2020, de mantenerse la actual situación del tipo de cambio”, explica Claudio Seebach, presidente ejecutivo de Generadoras de Chile.
Horizonte lejano
En la industria señalan que hay que diseñar una nueva fórmula para evitar un incremento de las tarifas de los clientes residenciales del país, dado que el fondo de estabilización ha generado un fuerte impacto en el sector privado. “Es obvio que el gobierno no va querer que suban las cuentas el próximo año, entonces la primera alternativa que tendría el gobierno es aumentar el fondo, pero lo que probablemente tendrá que pasar es que el gobierno y las empresas tendrán que trabajar para proponer una alternativa que no sean tan dolorosa como el fondo de estabilización que tiene un costo financiero que no es fácil sobrellevar para las empresas”, indica Romero.
Francisco Leo, de Electroconsultores, va más allá e indica que con este mecanismo no solamente las generadoras fueron impactadas, sino también las distribuidoras y transmisoras. ”Seguir ampliando el fondo más allá del financiamiento transitorio de US$1.350 millones, que ya están poniendo las generadoras con la ley que congeló tarifas, exigiría expandir esa exigencia (obligada) de financiamiento a las empresas transmisoras y a las distribuidoras también”, señala. Esto, porque cuando la dueña de casa paga la cuenta de la luz, “una parte de la cifra paga costos (y rentas) del comercializador, otra del distribuidor, otra del transmisor y finalmente, la parte más importante paga costos del
productor (generador)”, explica.
Claudio Seebach es claro, “el mecanismo de estabilización de tarifas fue establecido mediante la ley 21.185 en noviembre de 2019, por lo que cualquier revisión del fondo es materia de una nueva discusión legislativa”.
Pese a la premura, las conversaciones entre las privadas y el gobierno para analizar este escenario, aún no se han concretado, confirma Seebach. Fuentes de gobierno indican que este tema hoy “está en un horizonte más lejano”, pues los esfuerzos están puestos en avanzar en la normativa de servicios básicos que se discute en el congreso y que busca paliar los impactos del Covid-19 en la población más vulnerable.